martes, 24 de marzo de 2009

El WeNdIgO


El Wendigo es uno de los seres menos conocidos dentro de la criptozoologia, y muchas veces se confunde con el termino Windigo, aunque se trata de dos criaturas diferentes, mientras que el Windigo es un ser espiritual, el Wendigo es un ser vivo.

La leyenda del Wendigo es muy antigua, es parte del folklore de varias tribus nativo americanas, especialmente en la zona norte de Estados Unidos y Canada.

Mucha gente considera al Wendigo como un pariente del Sasquatch o el Bigfoot, aunque su origen es mucho mas complejo.El Wendigo originalmente es un ser humano, el cual es poseido por en espiritu maligno y se transforma en una bestia. La causa mas comun de convertirse en un Wendigo es consumiendo carne humana, es por esto que se cree que la leyenda del Wendigo se creo para prevenir a las tribus indias de caer en el canibalismo durante los tiempos de escasez de comidaSe dice que las personas mordidas por un Wendigo desarrollan un ansia por la carne humana y eventualmente se convertien a su vez en Wendigos.

El Wendigo tambien es conocido como el espiritu de los lugares solitarios, ya que se esconde en bosques y sigue silenciosamente a su presa, nunca a la vista esperando al momento en el que abalanzarse sobre ella.Uno de los ultimos informes de la aparicion de un Wendigo se dio en un pueblo llamado Rosesu en el norte de Minnesota desde los finales de la decada de 1800 hasta los años 20. Durante ese tiempo se sucedieron una serie de muertes inexplicadas hasta que finalmente cesaron las apariciones.

El YeTi


El Yeti o abominable hombre de las nieves es un ser legendario de la mitología de Tibet y Nepal.

Es considerado un críptido en la Criptozoología e interpretado como un simio gigante emparentado con el Pie Grande norteamericano. Ante la ausencia total de pruebas, sólo se cuentan con relatos que lo describen como un simio gigante bípedo que se cree está localizado en las zonas boscosas de la cordillera del Himalaya.Abominable hombre de las nieves es un nombre muy poco apropiado para el yeti : no es abominable, sino más bien tímido; habita en los espesos bosques de rododendros del Himalaya, y sólo ocasionalmente atraviesa las laderas y los valles nevados (parece ser que para alimentarse de un musgo salino que crece en las rocas de las morrenas glaciares); y probablemente no sea un hombre.


De las observaciones directas se deduce que es un animal omnívoro: se le ha visto devorar pequeños mamíferos, líquenes, frutas y bayas, e incluso chocolate y galletas robados a los alpinistas. El análisis de los excrementos que se han encontrado junto a los rastros confirma estas observaciones: contienen materia vegetal, huesos de pequeños mamíferos y aves, y restos de grandes insectos. Además, se han descubierto en esos excrementos tres nuevas especies de parásitos intestinales, lo que sugiere que su huésped es una especie desconocida. Los diferentes testimonios sobre su existencia hablan de un ser huidizo de más de dos metros de altura, completamente cubierto de pelo y que tiene la capacidad de silbar.Se han publicado noticias de supuestos ataques a tibetanos e incluso existen moldes en escayola de sus enormes pies; así mismo se han encontrado restos de su pelaje que posteriormente han demostrado ser de mamíferos herbívoros.Quienes avalan su existencia lo consideran un pariente lejano del orangután y descendiente del Ramapithecus que habitó en esta cordillera hace millones de años; y que por las características que presentaría el Yeti, posiblemente esté emparentado con el Pie Grande y el Wendigo. Sin embargo, no existen pruebas concluyentes de la existencia de este primate. Incluso otras investigaciones relacionan al Yeti con los osos.En algunos monasterios de Nepal se conservan restos supuestamente pertenecientes al Yeti, pero que posteriormente se ha demostrado pertenecen a un tipo de cabra local. Por otra parte es muy dudosa la existencia de simios de semejante tamaño.


Según otros autores, como el paleontólogo Juan Luis Arsuaga, los primates en general y los simios en particular sólo viven en lugares donde existen frutas todo el año, es decir, en las zonas tropicales. Además no hay primates en las estepas, ni en los pinares mediterráneos, ni en los bosques de coníferas.

PiÉ gRaNdE

Cientos de observaciones en todo el subcontinente norteamericano sugieren que el fabuloso piesgrandes existe realmente. Pero, ¿cómo puede sobrevivir esta criatura primitiva en la sociedad más desarrollada del mundo?

Secuencia de la única película filmada de un Bigfoot en California en 1967. Hasta el día de hoy se discute sobre su veracidad o no.

Informes Fidedignos acerca de "hombres bestia" en el subcontinente americano se dieron a conocer ya en 1830. Aunque para la información anterior a 1900 tenemos que confiar en viejas crónicas periodísticas, investigadores decididos han encontrado algunas descripciones sugerentes de bestias muy similares a las observadas en la actualidad. En 1851, por ejemplo, un diario local publicó la historia de dos cazadores de Greene County (Arkansas) que vieron un rebaño perseguido por un "animal que tenía las inconfundibles características del ser humano".
Era de gigantesca estatura, su cuerpo estaba cubierto de pelo y su cabeza provista de largos rizos que tapaban casi por entero cuello y hombros. El "hombre salvaje", después de mirarlos fijamente durante un momento, se volvió huyendo a gran velocidad con saltos de tres a cuatro metros. Sus huellas medían unos 33 centímetros.


El cronista añadía que se pensaba que el animal era "un superviviente del sismo que asoló la región en 1811". En casi todos estos primeros informes se consideraba a los hombres-bestia como "hombres salvajes", suponiendo que eran humanos que se habían refugiado en los bosques y en cuyo cuerpo se había desarrollado un tupido manto de pelo. Pero la moderna teoría evolucionista considera esto improbable.

Esta observación, que tuvo lugar en Arkansas, demuestra que las apariciones de piesgrandes no se limitan a los estados del Noroeste (norte de California, Oregon, Washington) y la Columbia Británica, donde se han producido la mayoría de ellas. Aunque en dichas regiones, con vastas zonas de montañas boscosas, se ha originado más información que en otras, piesgrandes o sus huellas han sido vistos en casi todos los estados norteamericanos y en las provincias canadienses. En Florida, muy lejos de lo que se considera el territorio tradicional de los piesgrandes, se han producido numerosas observaciones de "monos pestilentes" en los últimos años.
Muchos informes se limitan a describir un hombre-bestia apenas entrevisto en lugares boscosos. Pero existen otros muy detallados que muestran ciertos rasgos característicos. Al parecer, los piesgrandes son tímidos y no gustan de la presencia de los humanos, aunque también tienen una vena de curiosidad y a veces se acercan por la noche a grupos que acampan en los bosques, contemplan sus pertenencias y, ocasionalmente, balancean su caravana o su coche. Esta conducta y antiguos informes sobre la destrucción de campamentos de buscadores de minerales ponen de manifiesto el deseo de ahuyentar a los intrusos.


También han sido vistos merodeando cerca de casas de campo y aldeas, atraídos probable mente por la facilidad para conseguir comida. Pero, pese a su aspecto terrible y a la conducta provocadora de sus descubridores (cuya reacción es, con frecuencia, disparar primero y preguntar después), los piesgrandes no son agresivos con los humanos, existiendo muy pocas noticias de que hayan causado daños.

A medida que avanza el siglo XX y crece el número de personas que conocen la existencia de los piesgrandes, las noticias sobre observaciones antiguas y recientes van en aumento, y desde los años sesenta se dispone ya de un vasto archivo de informes. Aunque es obvio que esto se debía en parte a la mayor publicidad, ¿significaba también que los piesgrandes eran vistos con mayor frecuencia? Como, a causa del avance de la civilización, su hábitat debe ir reduciéndose gradualmente, es lógico suponer que su número disminuye. Quizá sea esta presión sobre su entorno lo que los fuerza a visitar lugares habitados en busca de alimentos, lo que explicaría a su vez el aumento de las observaciones.

Molde de una huella en yeso del Bigfoot que fue filmado en 1967 en Bluff Creek, California por Patterson. Después de la aparición del ser, dejó en el lugar numerosas pisadas que fueron posteriormente sacadas en molde. Obsérvese el descomunal tamaño de la huella la cual mide unos 40 cm, en comparación del pie de un ser humano que tan sólo mide unos 25 cm.
El Bigfoot Casebook (Registro de piesgrandes) contiene unas 1.000 observaciones de los últimos 150 años, y no es una colección completa. Según las estimaciones, sólo se comunica una de cada diez observaciones, o sea que pueden haber sido unas 10 000 durante dicho período. Existen también numerosas noticias sobre grandes huellas de aspecto humano que han aparecido por lo general en el barro, la nieve o la arena, y que se supone que son de un piesgrandes. Algunas veces, los investigadores que estudian los informes han hallado también pelo o heces que podrían pertenecer a un piesgrandes, pero los análisis que se han hecho de estas sustancias no suelen ser concluyentes.


Una selección de algunas informaciones correspondientes al presente siglo nos dará una imagen clara del piesgrandes y de su conducta. En 1969 Albert M. Fletcher escribió acerca de un encuentro que tuvo 50 años antes, cuando era leñador en Washington.
En otoño de 1917, cuando tenía 17 años, trabajaba como leñador en un campamento junto al río Cowlitz, en el estado de Washington. Una noche de luna iba caminando por una senda en dirección a un baile, cuando tuve la incómoda sensación de que algo me seguía de cerca. Miré varias veces por encima del hombro, pero no vi nada. Cuando llegué a una curva del camino, me escondí detrás de un árbol y esperé para ver de qué se trataba. Casi en seguida apareció una criatura muy grande y de aspecto humano, que debía medir unos dos metros o algo más.
Caminaba sobre las patas traseras, estaba cubierta de pelo oscuro, tenía barba y un pecho amplio, y, por lo que pude ver, no llevaba ningún tipo de ropa. Sin salir de mi asombro, grité alarmado y la criatura se volvió instantáneamente y se alejó corriendo por el bosque, siempre sobre las patas traseras. Cuando se lo conté a mis compañeros, algunos se rieron, pero otros aseguraron que habían visto lo mismo. Nadie tenía una explicación, ni un nombre, pero todos estaban de acuerdo en que era algo grande, con aspecto de mono, y también en que se parecía a un hombre muy fornido.

Secuestrado Por Un Hombre-Bestia

El buscador de piesgrandes René Dahinden, de pie junto a la estatua realizada por Jim McClain en Willow Creek, California. La figura, modelada según las descripciones de los piesgrandes vistos en la zona, tiene 2'40 m de altura, 1'04 m de anchura en los hombros y pies de 46 por 25 cm.
Otro informe, de 1924, relata algo que, de ser cierto, constituye el encuentro más espectacular con un piesgrandes entre los que se hallan registrados. Albert Ostman afirma haber sido secuestrado por un piesgrandes, que lo mantuvo cautivo varios días antes de que lograra escapar. El secuestro tuvo lugar cerca de Toba Inlet, en la Columbia Británica, en cuyas montañas acampaba en busca de minerales. Una noche un piesgrandes de unos 2,40 m lo cogió en su saco de dormir y lo llevó por el campo durante lo que al incómodo y asustado Ostman le parecieron tres horas.


Aún estaba oscuro cuando llegaron a su destino, pero al amanecer Ostman pudo comprobar que había cuatro piesgrandes, un macho y una hembra adultos y un macho y una hembra infantiles. Durante su cautividad, Ostman pudo estudiar la forma de vida de la familia y pensar en el modo de huir. Pero todos sus intentos fueron frustrados por "el viejo", como lo llamaba él. Ostman tenía su rifle, pero se resistía a hacer daño a las criaturas, pues lo trataban bien. Finalmente pudo escapar dando al "viejo" una gran cantidad de rapé, que lo dejó incapacitado. Mientras el piesgrandes corría a buscar agua, Ostman cogió sus cosas y salió huyendo a toda velocidad.
Los encuentros en los que el testigo puede observar largamente y de cerca a la criatura son los más interesantes. Un observador tranquilo puede aportar mucho a nuestro conocimiento sobre la materia. Uno de los mejores informes de este tipo fue elaborado por William Roe, que vio a un piesgrandes en la montaña Mica, en la Columbia Británica, en octubre de 1955.
Roe estaba oculto en un matorral, de modo que el piesgrandes -una hembra de 1,80 m de altura, 1 m de ancho y unos 135 kg. de peso- se acercó sin percatarse de que era observado. Cuando estaba a unos seis metros de distancia, se puso en cuclillas junto al matorral en que se escondía roe, quien más tarde escribió una cuidadosa descripción de la cabeza, la cara y el pelo del piesgrandes, y de la forma en que andaba. Por un momento se preguntó si no se habría metido sin darse cuenta en un set y estaba contemplando a un actor maquillado, pero pronto descartó esta idea. Su informe continúa así: Finalmente, esa cosa debió percibir mi olor, porque me miró directamente a través de un claro en el matorral. Una expresión de asombro pasó por su cara. Me pareció tan cómica que sonreí. Siempre en cuclillas, retrocedió tres o cuatro pasos, después se irguió por completo y marchó velozmente por donde había venido. Me miró un instante por encima del hombro, pero no con temor, sino como si no quisiera entrar en contacto con algo extraño.


Roe consideró la posibilidad de disparar a lo que hubiese resultado un ejemplar único y hasta levantó su rifle. Pero no pudo hacerlo. "Aunque en un principio lo había considerado un animal, en aquel momento sentí que se trataba de un ser humano, y supe que si disparaba nunca me lo perdonaría."

¿Humano o animal?

Los testigos no están seguros, y los investigadores tampoco. "Si tuviéramos un cadáver para examinarlo", claman. Pero los que consideran que lo importante es matar un piesgrandes para probar su existencia de una vez para siempre, se encuentran con la oposición de quienes piensan que hay que dejar en paz a la criatura. ¿Qué derecho tiene el hombre a cometer un asesinato para satisfacer su curiosidad?

Algunos informes sugieren que alguien con la suficiente paciencia y calma podría incluso hacerse amigo de un piesgrandes. En el otoño de 1966, una pareja que vivía cerca de Lower Bank, en Nueva Jersey, encontró huellas de 43 cm de longitud cerca de su casa, y más tarde vieron una cara que asomaba por una ventana situada a más de dos metros de altura. Durante algún tiempo fueron dejando con regularidad restos de verduras, que el piesgrandes consumía, pero una noche en que se olvidaron el visitante demostró su irritación arrojando un cubo de basura contra la pared. Un tiro al aire no lo asustó, y el hombre disparó al cuerpo del piesgrandes, que huyó para no volver más.

Nueve metros de vacilante película en color de 16 mm conmovieron al mundillo de los buscadores de piesgrandes en 1967. Los interrogantes que planteaba la cinta aún no han sido desvelados a satisfacción de todos. Detrás de la cámara se hallaba Roger Patterson, que en octubre de ese año cabalgaba con Bob Gimlin por los remotos bosques de la región de Bluff Creek, en el norte de California, en busca de rastros de piesgrandes. Sus caballos retrocedieron atemorizados cuando se hallaron de improviso frente a un piesgrandes hembra, en cuclillas junto a un arroyo. Patterson desmontó de un salto, tomó su cámara y echó a correr tras la figura que se alejaba. Antes de perderse de vista entre los árboles, el piesgrandes se volvió para mirar a los hombres. El famoso fragmento de película ha sido analizado numerosas veces desde 1967, pero aunque nadie haya podido probar que sea una falsificación, los hombres de ciencia se muestran escépticos sobre el particular.

Esto puede deberse a cautela natural, o al curioso argumento de que "los piesgrandes no pueden existir; por lo tanto, no existen". Entretanto, la criatura continúa apareciendo con regularidad en América del Norte, alarmando, aunque sin hacer daño, a los testigos, que invariablemente son cogidos por sorpresa, e intrigando a todos aquellos que meditan acerca de su existencia.

El ChUpAcAbRaS

En 1994 fue visto,por primera vez,en Puerto Rico,el Chupacabras, llamado así por su especial predilección por la sangre de cabra a la hora de alimentarse.Sin embargo,se sabe que ha atacado a otras muchas especies de animales,por ejemplo,perros y ovejas.Hasta donde llega nuestra información,nunca ha atacado seres humanos.

Por su peculiar forma de matar,es fácil saber si se trata del responsable de la muerte de un animal.Sus víctimas aparecen con pequeñas heridas punzantes en la garganta y la sangre de sus organismos ha sido succionada hasta la última gota.A menudo, también los órganos de las víctimas han desaparecido aunque,inexplicablemente,la única herida visible del animal son esos agujeritos en el cuello a los cuales nos hemos referido. Algunos rumores apuntan a que algunas de sus víctimas habrían aparecido con cortes en las orejas,parecidos a los que produciría un láser quirúrgico.

En muy pocos casos se han obtenido huellas de los alrededores de los cadáveres dejados por el Chupacabras.Lo usual es no hallarlas,ni tampoco restos de sangre,ni rastros de ningún tipo.En cuanto a su apariencia,es difícil de decir,puesto que las descripciones varían en gran medida.Podría ser verde o de color gris.Podría tener alas.Se habla,asimismo,de una larga lengua semejante a la de los lagartos.

Sería una criatura bípeda,al igual que los humanos,ya que se sostiene sobre las extremidades inferiores.Casi todas las fuentes coinciden en que su altura está entre los 3 y los 5 metros.Se desplaza andando,según algunos,volando al parecer de otros,o incluso podría hacerlo saltando al modo de los canguros.

Varios son los orígenes del Chupacabras que se barajan.Podría ser una nueva especie emparentada con las panteras.Los más excéntricos lo tienen por una especie extraterrestre.Según ellos habría llegado a la tierra a través de un portal abierto a otra dimensión que estaría situado entre Puerto Rico y Sudamérica.Una variante de esta curiosa teoría es que el chupacabras proviene de una nave espacial alienígena cuyos tripulantes lo llevarían como mascota o bien como algún especimen sometido a estudio.De algún modo,debido a algún tipo de avería en la nave o accidente,el Chupacabras habría escapado, quedando atrapado en la tierra.

En fechas muy reciente el mundo se sorprendió con la noticia del posible hallazgo de un esqueleto de Chupacabras en un poblado costaricense.Tras ser exhaustivamente examinado por un equipo de científicos,dos días despues,dictaminaron sin ningún tipo de dudas que se trataba del esqueleto de un perro.Porque posiblemente esa es la explicación más plausible al misterio del Chupacabras : el ataque de perros salvajes, aderezado por la imaginación de otros seres casi tan extraños como los que modestamente he tratado de describir : los seres humanos.

AkA alLgHoI kHoRhOi

El gusano de Mongolia fue visto por primera vez en 1926 en el sur del desierto de Gobi en Mongolia, es un gusano gigante y venenoso que vive, supuestamente, en el desierto de Gobi. Parece que fuera un personaje de ciencia-ficción, pero ha habido numerosos encuentros que apoyan la teoría de que existe en realidad. Se cree que el gusano tiene una longitud de cinco pies y que se asemeja al intestino de una vaca. Normalmente es de color rojo y a veces tiene clavos grandes sobresaliéndole de ambos extremos. Es altamente peligroso, puede lanzar un chorro de veneno letal y hacer descargas eléctricas por sobre varios pies.Fue vista numerosas veces, incluso por el presidente de Mongolia. Se comenta que la criatura, hiberna durante la mayoría del año, excepto durante junio y julio. Ivan Mackerle director del equipo de la República Checa que ha buscado al gusano en tres ocasiones. Durante la segunda expedición, Mackerle trató sin éxito de atraerlo fuera del desierto, utilizando una gran cantidad de explosivos. Volvió en el año 2004, esta vez utilizando técnicas de vuelo rasante para filmar las enormes extensiones del desierto; pero la expedición fracasó en la captura en cámara de alguna señal del gusano.Los científicos e investigadores aficionados están intrigados por la idea de una criatura, que ha sido reportada por los nómades mongoles durante cientos de años. Podría ser sólo cuestión de tiempo, el hecho de que una de las muchas expediciones obtenga pruebas de su existencia.

lunes, 23 de marzo de 2009

La BeStIa De GéVaUdAn

Entre 1764 y 1767, más de 120 personas, mujeres y niños, casi en exclusiva, fueron horriblemente asesinados –a dentelladas– por una bestia misteriosa. Todo esto ocurrió en la región montañosa del Gévaudan, en el centro de Francia, y nadie logró resolver el enigma a pesar de las insistentes batidas y de las inmensas recompensas que ofrecía el Rey. La bête (bestia) del Gévaudan pasó a formar parte de la mitología del país, de la misma manera que el monstruo de Lago Ness para los escoceses.

Lo cierto es que la bestia de Gévaudan aterrorizó a la población de Aveyron en el siglo XVIII y quebrantó la autoridad de Luis XV, convirtiéndose rápidamente en un asunto de Estado.

Cazadores de toda Francia atraídos por la generosa recompensa que se ofrecía por su piel, trataron de cazar a lo que se intuía podía ser un enorme lobo de un poder devastador inimaginable. Le calcularon 100Kg de peso y el pueblo pensaba que era el mismo demonio.

El primer ataque de la bestia se produjo el 30 de Junio de 1764 y su primera víctima una niña de 14 años, Jeanne Boulet, ese mismo verano se cobró más vidas y asesino 2 niñas más, 2 niños y una mujer de 32 años. En invierno el número de víctima se incrementaba alarmantemente incluso asesinando dos veces por semana.

Solía arrancar de un solo bocado la cabeza de las víctimas, lo que puede darnos una idea del tamaño y la fuerza de su mandíbula. En tan solo un año se había cobrado 54 víctimas. El monarca alarmado por tan abrumantes cifras decide enviar a sus tropas de choque, los "dragones", que formaban la élite del ejército real. Envió 4 tropas de caballería con el fin de realizar una batida que acabara de una vez con la bestia.

El jefe de una de las tropas quedo sorprendido al ver a la bestia, según su descripción era casi tan grande como su caballo pero infinitamente más rápida y ágil, tras tratar de abatirla a disparos sintió que las balas no eran capaces de traspasar su piel.

Otras descripciones le señalaban como un enorme lobo de aspecto muy extraño, con el lomo rayado y una línea negra que le recorría desde el cuello hasta la cola, el color de su cuerpo era rojizo, con el morro afilado, una cola muy larga y fuerte y extraordinariamente móvil y con unas fauces desmesuradas.
Escultura en Francia que representa a la Bestia de Gévaudan.

Los esfuerzos de los "dragones" eran en vano, no solo se debían enfrentar al difícil duelo de encontrar a la bestia además tenían otros duros competidores, los caza recompensas, que atraídos por el precio que se puso por dar fin a la vida de la bestia les tendían emboscadas y les confundían con pistas falsas.
La bestia arrancaba la cabeza de sus víctimas de un solo bocado.

Por mas lobos que abatían las víctimas no cesaban, murieron decenas de estos animales. Sin duda el comportamiento de la bestia no se asemejaba al de un lobo común pues expertos cazadores de toda Europa trataban de eliminarla con las técnicas que se empleaban para la caza de estos.

La gente empezaba a sentirse muy asustada, ni la participación del Rey había conseguido aplacar a la bestia. Los clérigos aprovechaban para hacer su campaña diciendo que la bestia solo atacaba a las jóvenes más lascivas, los nobles acusaban a los gitanos pues decían que alguna de las bestias de su circo debía haber escapado. También se apunto a un terrateniente que había recorrido África con una compañía comercial, criaba mastines asilvestrados, lobos, leones y tigres. El pueblo llegó a pensar que había cruzado a estos animales hasta dar con la bestia.

Finalmente la bestia fue muerta y la leyenda cuenta que fue abatida con una bala de plata hecha tras fundir una medalla de la virgen. El monstruo fue llevado ante el Rey, más tarde fue embalsamado y años después sus restos desaparecieron. Era algo parecido a un lobo gigantesco de fauces enormes.

CaRcHaRoDoN mEgAlOdOn


El megalodon, llamado también megalodonte, tiburón megadiente y tiburón blanco gigante (Carcharodon megalodon) fue un tiburón gigante que vivió probablemente entre hace 20 y 1,6 millones de años, aunque se ha llegado a sugerir fechas de extinción más tardías e incluso que pudiera sobrevivir hoy en día
Restos fósiles

El megalodon se conoce únicamente por numerosos dientes fósiles y algunas vértebras y esqueletos parciales en el Caribe. Los dientes son en muchos aspectos similares a los del tiburón blanco actual (Carcharodon carcharias), pero con un tamaño que puede superar los 17,5 centímetros de largo, por lo que se suele considerar la existencia de un estrecho parentesco (y probablemente, también parecido aspecto y conducta) en ambas especies. Sin embargo, algunos investigadores opinan que las similitudes entre los dientes de ambos animales son producto de un proceso de evolución convergente.

Denominación y evolución

En 1995 se propuso trasladar la especie a un nuevo género, Carcharocles. A fecha de hoy, la cuestión no se ha resuelto del todo. Muchos paleontólogos se inclinan en la actualidad por el nombre de Carcharocles, mientras que otros (sobre todo especialistas en biología marina) mantienen su conexión con el gran tiburón blanco e incluyen a ambos animales en el género Carcharodon. Los defensores de Carcharocles opinan que el ancestro más probable del megalodon fue el Otodus obliquus del Eoceno, mientras que el tiburón blanco descendería de Isurus hastalis, el "mako de dientes anchos" del Mioceno. Existe la teoría de que los megalodones adultos se alimentaban de ballenas y se extinguieron cuando los mares polares se volvieron demasiado fríos para los tiburones, permitiendo que las ballenas estuviesen a salvo de ellos durante el verano.

Tamaño

Las estimaciones más sensatas del tamaño de esta criatura oscilan entre los 12 y 15 metros. Las reconstrucciones previas con longitudes que podían llegar a los 30 metros se consideran por lo general como poco precisas.

Supervivencia actual

Aunque la gran mayoría de los expertos consideran que la evidencia disponible indica claramente que el megalodon está extinto, la idea de que una población superviviente pudiese seguir existiendo en la realidad parece haberse asentado en el imaginario público, a pesar de que la mayor parte de las evidencias en favor de esta idea es por lo general escasa y ambigua.

LeViAtáN


El Leviatán –vocablo proveniente del nombre hebreo clásico Livyatan– era un monstruo bíblico que vivía en el mar. Es mencionado en el Antiguo Testamento: Salmo 74:13-14, Job 41 e Isaías 27:1). La palabra “leviatán” suele ser considerada sinónima de cualquier monstruo o criatura acuática de gran tamaño. En hebreo moderno, significa simplemente "ballena".
La palabra "Leviatán" aparece seis veces en la Biblia; también se menciona en el Génesis 1:21: "Dios creó un gran monstruo del mar llamado Taninim". Este nombre puede ser traducido como un monstruo del mar, un cocodrilo o una serpiente gigante. Interpretaciones del Génesis aducen que Dios creó un Leviatán masculino y otro femenino, luego mató a la hembra, la saló y se la ofreció en alimento a los justos, porque si el Leviatán se procreara el mundo no podría más que someterse ante él.


El Leviatán era un pez monstruoso creado durante el quinto día de la Génesis divina. Su historia se relaciona bastante con el “Bathra 74b” del Talmud, donde se dice que el Leviatán será muerto y su carne será servida como banquete a los justos en los tiempos que vendrán, y que su piel se utilizará para cubrir la tienda donde ocurrirá el banquete.


Además, el Leviatán se puede interpretar también como el mar mismo. Algunos eruditos lo han entendido como una referencia bíblica metafórica de los temibles animales marinos que aterrorizaron el reino de Israel. Otros comparan la mención a Tiamat y a otros monstruos similares que representaron al mar como enemigo a los Dioses, en mitos de culturas cercanas.

La interpretación cristiana del Leviatán lo considera a menudo como un demonio o un monstruo natural asociado a Satán o al diablo. Como algunos han sostenido, es el mismo monstruo que “Rahab”, término empleado varias veces en el Antiguo Testamento para designar un poder malvado del Caos (Isaías 51:9).
Por eso, se ha creído que el Leviatán bíblico representa las fuerzas pre-existentes al caos. El Salmo 74:13-14 dice: "eras Tú quien movió el mar con su fuerza, y rompió las cabezas de los monstruos en las aguas; eras Tú quién mató al Leviatán, y lo sirvió como alimento para las criaturas de la Tierra". Y en Génesis 1:2 leemos que “la tierra era vacía y no tenía forma, la oscuridad cubría toda la superficie y entonces el espíritu de Dios emergió desde la profundidades del mar”.

Según las escrituras del Padre Sebastián Michaelis, Balberith –demonio que, se dice, poseyó a la Hermana Madeleine– le dijo al sacerdote no sólo quiénes eran los otros demonios que poseían a la monja, sino también cuáles eran los santos especiales que servirían para oponerse a ellos. Leviatán fue uno de los demonios nombrados por Balberith. Dijo, además, que su adversario era San Pedro.
Para Santo Tomas de Aquino, Leviatán es el demonio de la envidia y el primer diablo destinado a castigar a los pecadores correspondientes

viernes, 20 de marzo de 2009

KrAkEn


El kraken es el "monstruo marino más grande conocido jamás". Sus brazos son largos como mástiles de buques y cuando se queda parado en la superficie, "un regimiento podría maniobrar sobre su espalda". Presente primero en el bestiario fantástico de los marineros, el Kraken un papel importante en la criptozoología. Los relatos de los marineros escandinavos describen un monstruo provisto de numerosos brazos, largos como mástiles, que se agarra a los buques y los arrastra hacia el fondo. Figura muy presente en el folklore escandinavo, la existencia de la criatura no ha sido demostrada nunca y conserva todo su misterio intacto.
La primera mención nominal del Kraken la encontramos en la obra de un viajero italiano, Francesco Negri. La obra se titula “Viaje septentrional” (1701). Negri viaja a Escandinavia entre 1663 et 1665. En su obra leemos: “"Se llama sciu-crak a un pez desmesurado, de figura llana y redonda, provisto de numerosos cuernos o brazos en sus extremidades. A través de estos cuernos, levantados en todas partes, se agarra a los buques de los pescadores e intenta sumergirlos.”

Algunos creen que este pez tiene las dimensiones de una ballena. Negri anotó el nombre de la criatura. Sciu corresponde al noruego soe (mar) y crak debe leerse krake o kraken. Negri es el primero en ofrecer una descripción del monstruo local. Un pasaje de "La Historia natural" del romano Caius Plinius Secundus narra también el caso de un monstruo marino con tentáculos que ataca reservas de peces en salmuera. La descripción corresponde completamente a la del kraken.

Es muy probable que estas leyendas sean en realidad historias verdaderas exageradas y que el kraken sea realmente un calamar gigante. Y es que, en efecto, estos últimos pueden medir hasta 20 metros de longitud, y dejan grandes cicatrices en los cachalotes que los cazan.

OGopOGo


El nombre de Ogopogo se originó de una canción que fue adaptada para la criatura. La mayoría de los reportes hablan de un tronco flotante que de pronto cobra vida y comienza a nadar.The Okanagan.- Un equipo de filmación ha conseguido captar, al menos en parte, al Ogopogo, un primo canadiense del monstruo del lago Ness. Con esta, son ya tres las investigaciones llevadas a cabo en busca de pruebas que demuestren la existencia de este escurridizo animal.El Ogopogo apareció por sorpresa el pasado jueves 18 de abril cuando un equipo de filmación se disponía a grabar la reconstrucción de un avistamiento de hace 24 años. El equipo de Tripod Film and Video Productions de Kelowna comenzaba a grabar la escena cuando Bill Steciuk divisó a la criatura al oeste del puente del lago Okanagan: “Vimos dos o tres ondulaciones dentro y fuera del agua… El lago estaba en calma a pesar de la estela de cerca de 200 metros que iba dejando a su paso”, declaró uno de los miembros del equipo, que tomó una serie de fotografías con su cámara de 35 milímetros. Esa misma noche, ya se pudo revisar la cinta, en la que la figura aparece nítidamente en pantalla durante un minuto y medio: “Mi socio, Len Melnyk, estaba absolutamente seguro de que no se trataba de una onda o estela de barco. Había algo debajo del agua”, ha dicho uno de los responsables del proyecto. Hay también varias secuencias en la película que muestran anomalías en la superficie del agua.

El equipo no quiere precipitarse: “Estamos intentando conservar tanta credibilidad como sea posible. Se trata de una búsqueda científica seria”.
Renee Boucher, una agente inmobiliaria que se encontraba en el lugar, también notó la ondulación en el lago: “Vi moverse algo de una manera muy lenta y tranquila, hacia arriba y hacia abajo. Parte del cuerpo emergía a la superficie, era enorme, negro y brillante. Era muy, muy largo”. “Incluso una becaria que trabajaba en la película dijo haber visto como la cabeza salía a la superficie expulsando agua a través de su boca, y lo que posiblemente era una aleta o la cola”, dijo Boucher.A fines de los años 40, el escritor canadiense Farley Mowat (que en esa época trabajaba como naturalista del gobierno) oyó hablar de un monstruo llamado Angeoa, que había sido visto en Tulemaliguak (lago Dubawnt). Su informante era un amigo esquimal cuyo padre, con un compañero, había visto a la criatura a fines del siglo pasado. Una vez se encontraron los huesos de un animal muy grande en la costa del lago; de ahí su nombre en esquimal, que significa “lago de los huesos amontonados”.

El MoNsTrUo DeL lAgO nEsS

Nessie, como se le conoce cariñosamente al monstruo, la historia lo recoge desde el siglo VI, pero cada cierto tiempo un grupo de investigadores recorre los 40 kilómetros de largo que tiene el lago en una cuidadosa búsqueda que confirme la leyenda.

Los testigos oculares relatan que el monstruo tiene un color rojo oscuro, piel lisa y que mide entre ocho y nueve metros de longitud. Con estas descripciones algunos científicos piensan que puede tratarse de un plesiosaurio, una especie de dinosaurio marino.

¿Cómo Surgió Nessie?

Esta fotografía es sin lugar a dudas la más conocida de Nessie.
Una vieja leyenda cuenta que un misionero fue el primero en dar fe de un encuentro con el monstruo. Desde ese momento y hasta la fecha, miles de personas comentan sorprendidos sus encuentros con Nessie.
Unos, lo han divisado mientras transitaban por la carretera que bordea el lago, otros, desde el castillo de Urquhart situado en una de sus orillas. En algunos avistamientos los curiosos han tomado fotos, algunas de ellas reveladoras de siluetas extrañas en la superficie, mientras que otras no muestran nada importante.
A pesar de que existen varias imágenes, ninguna es lo suficientemente clara y concluyente sobre la bestia marina, y aunque hay muchos encuentros reportados, no se tiene noticias de ataques a seres humanos.

Las Características Del Lago Ness



El lago es un alargado canal de agua que se extiende por 40 kilómetros. Sus aguas son ligeramente cálidas en la superficie y muy frías a medida en que se desciende. Las montañas le bordean con acantilados que proyectan una imponente sombra sobre las aguas. Hay sitios en que a pocos metros de la orilla la profundidad llega a los 200 metros, lo que hace de difícil la investigación.
Una teoría que defienden los creyentes de Nessie, es que el lago tiene profundos canales subterráneos que lo comunican con el mar, por los que los supuestos monstruos entran y salen a su antojo, justificando así las largas ausencias entre sus apariciones.
La superficie del lago está casi siempre tranquila, por lo que esta ausencia de olas hace más fácil la observación, y también la confusión, pues un pequeño tronco de árbol movido por una ligera brisa, puede crear una ola con su consecuente efecto óptico para que todo el mundo piense que ha visto a Nessie "echando un vistazo".

Dudas Razonables Sobre Nessie


La psicóloga Susan Blackmore, quien recorrió las orillas del lago, lo percibió a primera vista como amenazante, con aguas tan negras capaces de infundir temor. Para ella está claro que la gente maneja la posibilidad y la esperanza de poder ver algo en la superficie, por lo que cualquier movimiento de olas es achacado a la presencia del monstruo. La tensión y los deseos de un ser testigo excepcional de avistamiento, pueden conducir a confundir una realidad con la ficción, asegura la psicóloga.
Pero la lógica de otros científicos funciona sobre la base de la alimentación. Por lo que plantean preguntas claves.
Si Nessie pertenece a la época de los dinosaurios, entonces ha tenido que reproducirse por miles de años, por lo que existiría más de uno.
Para mantenerse vivos, la supuesta manada tendría que devorar grandes toneladas de peces que no existen en el lago.
En las grandes profundidades, es un misterio el tipo de pez que le sirve de alimento. Pues se cree que los organismos microscópicos que habitan en una oscuridad total en el fondo del lago, no serían suficientes para alimentar un cuerpo que pesaría cientos de kilogramos.

La Famosa Foto


La foto más famosa de Nessie se afirma fue tomada en 1934, y por mucho tiempo se consideró la prueba más contundente de la existencia del monstruo. Sin embargo, en 1994 poco antes de fallecer una de las personas involucradas en la histórica foto, confesó que se trataba de un fraude. El supuesto monstruo no era más que un muñeco bien confeccionado situado encima de un flotador. Al parecer la burla se inició por la venganza de un periodista a sus colegas por haber sido despedido de su trabajo.
Sesenta años después de conocerse el truco, la credibilidad de Nessie sufrió un duro golpe. Aun así, para los escoceses, quienes reciben una entrada considerable de dinero por concepto de turismo, la presencia de las aguas negras en el misterioso lago sigue siendo su principal aliada para que la gente, crédula o no, siga llevando a través del tiempo la leyenda del monstruo más famoso de Escocia.

NaHuElitO

El origen de la leyenda se remonta a relatos indígenas previos a la conquista. Los primeros exploradores obtuvieron de los indios del lugar historias acerca de encuentros ocasionales con enormes monstruos acuáticos. El primer avistamiento registrado data de 1910, aunque George Garret, su protagonista, lo hizo público mucho tiempo después. sigue–>En 1910 Garret trabajaba en una compañía ubicada cerca del Nahuel Huapi. Un día de ese año, luego de navegar por el lago y a punto de desembarcar, pudo avistar a unos 400 metros de distancia una criatura cuya parte visible medía entre 5 y 7 metros de largo y sobresalía unos dos metros por encima del agua.Al comentar su experiencia con gente del lugar, Garret se entera de historias similares relatadas por los indígenas. Pero el hecho se hace público recién en 1922, cuando lo cuenta al diario Toronto Globe. En esos días se organizaba la primera expedición para buscar a Nahuelito y la controversia estaba en su punto máximo, llegando a la prensa internacional.A partir de 1897, el Dr. Clemente Onelli, director del zoológico de Buenos Aires, comienza a recibir informes esporádicos acerca de una extraña criatura habitante de los lagos patagónicos. En 1922 recibe el testimonio de Martin Sheffield, un buscador de oro norteamericano, acerca de un rastro de grandes huellas en la orilla del lago Nahuel Huapi. En el centro del mismo Sheffield afirmaba haber visto un enorme animal desconocido.Convencido por el informe de Sheffield, Onelli decide organizar una expedición de búsqueda. La misma fue liderada por el superintendente del zoológico, José Chiagi, y entre los participantes había reconocidos cazadores armados con rifles para cazar elefantes y dinamita para minar el lago.La gente reaccionó negativamente ante la participación de cazadores, y el Dr. Albarracín, Presidente de la Asociación Protectora de Animales, le solicitó al Ministro del Interior que revocara la autorización para la búsqueda, ya que las leyes prohibían la caza de animales exóticos.Finalmente se resolvió el tema del permiso y la expedición siguió adelante, pero regresó a Buenos Aires sin resultados positivos. La historia tuvo repercusión internacional, llegando a ser comentada en publicaciones como la revista Scientific American.Más recientemente, en 1960, la Armada Argentina persiguió en el lago un objeto submarino no identificado durante 18 días, sin conseguir identificarlo.El crecimiento como destino turístico de la ciudad de Bariloche, situada a orillas del Nahuel Huapi, aumentó los avistamientos ocasionales, pero nunca se obtuvo un registro gráfico concluyente.

Teorías


Se han propuesto diversas teorías para explicar el mito, pero ninguna resiste un análisis serio.Los relatos indígenas difícilmente se pueden citar como argumento, ya que los nativos tenían leyendas sobre la existencia de monstruos acuáticos en prácticamente todos los lagos y ríos de la Patagonia. El antecedente directo de Nahuelito parece ser el mito local del “cuero”, monstruo sin cabeza ni patas que supuestamente habitaba en el lago.La hipótesis más popular es la del monstruo prehistórico; Nahuelito sería un sobreviviente de la época de los dinosaurios, probablemente un plesiosaurio. Otros apoyan la teoría de un ictiosaurio, en base a la abundancia de fósiles de este animal encontrados en la región. Sin embargo, los lagos patagónicos se formaron en una época geológica posterior a la extinción de los dinosaurios, lo que refutaría la hipótesis.También se ha sugerido que podría tratarse de un milodón, un mamífero terrestre extinto hace mucho tiempo, que aunque podría coincidir con algunas descripciones, no tenía hábitos acuáticos.Una versión más moderna (y más fantástica) sugiere que Nahuelito sería una extraña mutación de algún animal local producida por los experimentos nucleares realizados en la década de 1950 por científicos alemanes (o más recientemente por el Centro Atómico Bariloche).Tal vez la última teoría en llegar al público sea la que atribuye las apariciones a un pequeño submarino de origen desconocido, la que muchos interpretan como una variación cultural moderna del mito del monstruo acuático. Pero esta última teoría no ha sido jamás demostrada.Es llamativo, sin embargo, que la mayoría (aunque no todos) de los avistamientos describen al Nahuelito de forma parecida: una longitud de aproximadamente 10-15 metros, dos jorobas, piel de cuero y, en ocasiones, un cuello en forma de cisne. Esta caracterización coincide con las descripciones que hicieron los Mapuches unos doscientos años atrás. Esto sugiere que la ciencia, hasta el momento, no ha podido explicar ciertas observaciones, y no que las observaciones no son ciertas porque la ciencia ha fallado en explicarlas.

MoNsTrUo DeL lAgO ChAmPlAiN

Durante muchos millones de años, los mares estuvieron bajo el dominio de los plesiosaurios, de cuello largo y cuerpo en forma de tonel, y de los ictiosaurios o peces lagartos. Poco a poco se vieron desplazados por lagartos marinos de hasta doce metros de largo, los mosasaurios. Es posible que hayan logrado sobrevivir, adaptándose a la vida de las profundidades marinas y lacustres.
Más allá de las teorías, los relatos y las fotos son bastante relevantes. Es probable que estos cuellos largos sean más que una leyenda.
Quizá después de leer sobre estas criaturas acuáticas piense seriamente en aprovechar sus vacaciones y tratar de verlas con sus propios ojos.


El científico canadiense W. H. Lehn ha descrito un efecto atmosférico que podría producir una deformación de los objetos normales dando así pie a los relatos sobre monstruos. Se produce cuando una capa de aire relativamente caliente se superpone a una capa de aire frío justo encima del agua.

Los rayos de luz que parten de un objeto que está en el agua, como por ejemplo un escollo, se desvían hacia abajo en la zona de transición entre las dos capas de distinta temperatura. Una persona situada a una distancia apropiada vería una composición de múltiples imágenes del objeto: una formada por los rayos de luz que han llegado en línea recta hasta sus ojos, y otras formadas por los rayos que han seguido una trayectoria curva.
Esta imagen compuesta del objeto puede quedar deformada de muchas maneras. Uno de los efectos más comunes es el desproporcionado alargamiento vertical de la imagen. La forma resultante es muy parecida a algunas de las descripciones de cuellos de serpientes marinas. Puede ocurrir que el objeto sea reconocible (por ejemplo, un barco). O puede que las condiciones atmosféricas se normalicen. Pero en otros casos las capas de aire frío y caliente superpuestas pueden crear la ilusión óptica de una criatura que se sumerge y reaparece. Puede que el movimiento del objeto tenga una base real: por ejemplo, una "serpiente marina" podría ser una orca que levantara un instante la cabeza por encima del agua (modalidad de caza). El fenómeno es, de hecho, un espejismo.

jueves, 19 de marzo de 2009

DeFiNiCióN


El zoólogo Bernard Heuvelmans la definió como una disciplina que estudia los animales cuya existencia no es admitida por la ciencia, llámenseles yeti, bigfoot o monstruo del Lago Ness. Estos animales parcialmente desconocidos- si fueran totalmente desconocidos no estaríamos hablando de ellos- reciben el nombre de críptidos.Hay varias definiciones: - Zoología predictiva aplicada al campo de los descubrimientos zoológicos: esta es la definición dada por el padre de la criptozoología, Bernard Heuvelmans, y es la que más se ajusta al espiritu de la Sociedad Internacional de Criptozoología, fundada en 1982. Se trata de predecir la existencia de nuevas especies antes de que ésta se vea confirmada de manera definitiva. Sólo englobaría aquellos casos de animales que se dan por extinguidos- pero sobre cuya supervivencia se sigue discutiendo- cuando el animal en cuestión merezca ser clasificado, como mínimo, como una nueva subespecie. ( ej: el tigre de Tasmania no sería, por lo tanto, un críptido, aunque se ha destacado la búsqueda de ejemplares aún vivos de este marsupial debido a su similitud con las investigaciones criptozoológicas ) Si uno se atiene a la definición de Heuvelmans, eso supone que algunas especies catalogadas por la zoología podrían ser calificadas de " ex-críptidos" - lo que no quiere decir que sean "críptidos", ni "éxitos" o "logros" de la criptozoología - y, asimismo, englobaría el trabajo de algunos investigadores a los que no se puede considerar criptozoólogos ( principalmente se trata de zoólogos, pero también de gente que no eran profesionales de la ciencia en ninguna de sus ramas... Johnston, Roulin, Carl Hagenbeck, Yukio Togawa, Meinertzhagen, etc...). Por ejemplo, al Calamar gigante( Architeuthis dux) se le podría calificar de " ex-críptido"( al igual que al Okapi ) porque el proceso de su descubrimiento se ajusta a la metodología de la criptozoología. - El estudio de la evidencia relativa a animales de tamaño o forma inusual o cuya presencia resulta inesperada en el tiempo o en el espacio: ésta es la definición propuesta por el biólogo norteamericano Roy Mackal. Abarcaría especies consideradas extintas ( dinosaurios, megalodón, tigre de Tasmania, etc..) y animales cuya existencia no ha sido comprobada y cuyo aspecto( chupacabras, mothman, etc...), tamaño ( serpientes descomunales, aves gigantes, etc..) o color ( tigres azules, jaguares pseudomelánicos, etc...) se podría calificar de inusual. También incluiría a animales que han sido avistados repetidamente en sitios donde se supone que no existen en estado salvaje ( leones en Norteamérica, panteras en las Islas Británicas, etc...). Si uno se atiene a esta segunda definición, el hecho de que un animal haya sido catalogado por la ciencia no lo excluiría de la criptozoología. Además, Mackal pone énfasis en el grado de rechazo o la polémica que debería suscitar un críptido como un requisito importante para que forme parte de la criptozoología ( de ahí que se usen los términos "inusual" o "inesperado")...